
“Estamos abiertos durante todo el día. Al principio para que no hubiese aglomeraciones, pero ahora creo que somos de los pocos mercados que están abriendo en su horario habitual”, nos cuenta Eladio.
Como dato positivo, nos comenta que han comenzado a realizar muchísimos envíos por teléfono, e incluso han conseguido hacer algún nuevo cliente, gracias a su presencia en la página online del Mercado de Barceló y en otros sites de barrios aledaños.
Para garantizar la seguridad e higiene, los repartidores dejan el pedido en la puerta para evitar el contacto y se paga con tarjeta. Algo, como señalaban sus otros compañeros, imprescindible. En el punto de venta trabajan con mascarillas y guantes y disponen de botes de gel para ellos y para el público, a pesar de que la manipulación del producto en el punto de venta especializado se reduce, al ser tratado únicamente por el profesional.
“Lo más importante ahora es ser buenos compañeros y no dejarnos a nadie en el camino”. Con esa llamada a la unidad, Eladio no quiere dejar pasar la oportunidad de apelar a todos los comerciantes del mercado a unir fuerzas para combatir la situación, desde la colaboración.
¡Ánimo al equipo de Hermanos Escudero y a todos los carniceros, charcuteros, polleros y casqueros!
